"En campañas, el país es uno de los mayores lavadores": directora de la MOE
La directora de la MOE, Alejandra Barrios, dice que es difícil vigilar la financiación de candidatos.
Como es tradicional para esta época previa a votaciones, en la Misión de Observación Electoral (MOE) las alarmas están prendidas por los riesgos y amenazas que pesan sobre los comicios en los que se elegirán a integrantes del Congreso y al próximo presidente de la República.
La semana pasada la MOE presentó los mapas en los que se les advierte a las autoridades nacionales, electorales y a los partidos, en donde hay peligro para las elecciones del 9 de marzo.
Con las cifras ya en frío y con un análisis más reposado, Alejandra Barrios, la directora de la MOE, habló sobre los comicios, la eventual conformación del Congreso y las fuerzas que podrán incidir en la campaña.
¿Cuáles fueron los riesgos que la MOE identificó para las elecciones?
Entregamos el mapa de riesgo 2014 con énfasis por Congreso de la República, elección que es diferente de la presidencial, que es más tranquila. Vimos los riesgos por factores de violencia y por fraude electoral y hemos identificados seis zonas en las que, si bien han venido disminuyendo riesgos por violencia, han venido en aumento los indicativos de fraude. Esas regiones son el suroriente: Amazonas, Vaupés, Caquetá, Putumayo y Guaviare; la zona de Nariño en Tumaco, Roberto Payán y Magüí Payán. Vimos que sube muchísimo el riesgo en Chocó. En Antioquia identificamos la zona del norte y la del bajo Cauca, la cual linda con el Chocó. Otra es en Norte de Santander y Arauca, en la franja de frontera con Venezuela. Todas estas zonas tienen riesgos electorales y de violencia política.
¿En cifras de municipios estamos hablando de cuántos en total?
Identificamos 260 municipios en riesgo; de esos, 50 en riesgo extremo, 156, en alto y 54, en medio. Al compararlos con las elecciones de Congreso de 2010 se ve un incremento de 60 municipios. Por departamentos, el de mayor riesgo es Caquetá, seguido de Atlántico, Sucre y Córdoba.
¿A qué atribuyen los riesgos en el suroriente del país?
A tres situaciones: la presencia de las Farc, que hay un corredor de actividades extractivas (petróleo y minería) y que los riesgos se mueven hacía el Pacífico por el narcotráfico en Nariño y Chocó. Allí hemos identificado que hay disputa territorial entre bacrim, narcotráfico y bandas locales que quedaron después de la desmovilización del paramilitarismo.
¿Qué le preocupa más a la MOE: los riesgos electorales o de violencia?
Hay algo claro, están jalonando los riesgos los delitos de fraude electoral, eso muestra que algunas campañas están jalando. Mientras el riesgo por violencia ha venido disminuyendo, no lo que desearíamos, el 7% frente a elecciones anteriores, en esta ocasión el fraude al voto es latente. Mientras los armados ilegales están disminuyendo el impacto en los procesos electorales, las campañas políticas y algunos candidatos son los que tiran hacia arriba el nivel de riesgo.
¿Qué delitos electorales en particular podrían suceder en marzo?
En lo que tiene que ver con participación, las tendencias de voto nulo, cuando aumenta la cantidad de estos votos es claro que puede haber algún tipo de fraude en los jurados. También irregularidades en las registradurías. Y se puede ver con el aumento del voto en blanco.
Será lo mismo de siempre, ¿que pese a las advertencias no pasa nada?
Sí ha venido pasando; se debe reconocer que los partidos están prestando mayor atención a quién le entregan el aval. En la balanza entre votos y transparencia, parece que siguen ganando los votos, pero por lo menos están más interesados por saber quién es el candidato. Antes entregaban avales sin mayor reflexión.
¿Preocupa cómo ha sido la financiación de los candidatos?
Al financiamiento de las campañas ha sido imposible hacerle seguimiento. Colombia sigue siendo, en los procesos electorales, uno de los mayores lavadores de recursos ilegales, ya no sólo del narcotráfico, es incontrolable lo que pasa en las campañas políticas.
¿El próximo Congreso podrá estar cooptado por el paramilitarismo o por algún otro tipo de grupo ilegal, como en el pasado?
Hemos tenido una transformación en la forma en que se han venido haciendo las campañas. Aquí la parapolítica tuvo un efecto real. Hace unos años, cuando arrancamos a hacer los análisis, la lectura del mapa político era más sencilla, porque si se entendía la dinámica de los grupos ilegales y la dinámica del poder político.
Hoy la relación de ilegalidad y política es mucho más local, se están cuidando de no cometer los mismos errores, como hacer alianzas con bandas criminales para concentrar votos y obligar a votar por determinado candidato; hoy eso es más difícil que pase. Lo que está sucediendo es más difícil comprender: cuáles son esos tipos de relaciones entre ilegalidad y política, porque pasan más por el clientelismo, la contratación y la financiación ilegal de las campañas.
El Valle
Según la MOE, el Valle del Cauca tiene 23 municipios que presentan riesgos por violencia, 7 por riesgo de fraude en Senado y 13 por riesgo de fraude en Cámara.
Los municipios que presentan riesgos por violencia, con un índice extremo son Cali, Buenaventura y Pradera.