El Alcalde cuestionó que el Procurador pueda destituir a alguien que fue elegido por voto popular.
En una de las declaraciones más fuertes que ha hecho hasta ahora, el alcalde de Bogotá, Gustavo, aseguró el jueves que una eventual destitución suya por parte de la Procuraduría, que lo investiga por posibles irregularidades en el nuevo esquema de aseo, se convertirá en “una ruptura democrática en un Estado de derecho”.
En una entrevista con la emisora Todelar, el mandatario cuestionó que un funcionario que no tiene facultades judiciales, como el procurador, pueda destituir a otro que, como él, fue elegido por voto popular. “Uno que es funcionario porque el pueblo lo eligió no tiene por qué estar pensando todos los días si va a seguir gobernando o no va a seguir gobernando, porque un funcionario no electo y no judicial pueda decirle al pueblo que votó por mí que su voto no valió”, dijo.
“Así no es en una democracia, es una violación de la convención de Derechos Humanos del pacto de Costa Rica que Colombia firmó, y no ocurre en ninguna otra parte del mundo”, añadió.
En la investigación que se le adelanta, y que ya está a punto de fallar, la Procuraduría cuestiona que el Alcalde le haya entregado la recolección de las basuras a la Empresa de Acueducto (a través de su filial Aguas de Bogotá), pues dice que no tenía la experiencia requerida.
También califica como una falla la expedición de un decreto que le cerró las puertas a las firmas privadas en la prestación del servicio y el uso de volquetas, ya que considera que estos vehículos no son aptos para recoger basuras y se convierten en un riesgo para la salud y el medio ambiente.
Para Petro, “el pliego de cargos es un exabrupto antidemocrático y los cargos están llenos de ideología, de prejuicio y de política”.
Fuente : El Tiempo