Prorrusos acusan a Ucrania de atacar autobús en Donetsk

El texto reza que «La República Popular de Donetsk (RPD) no tiene nada que ver con la muerte de diez pasajeros de un autobús de línea regular atacado” cerca de la localidad de Bugas, situada entre Donetsk y la ciudad portuaria de Mariúpol, última ciudad importante del sudeste de Ucrania en manos del Gobierno.

Los prorrusos resaltaron que el lugar donde ocurrió el atentado «está fuera del alcance» de su artillería razón por la que acusaron a las autoridades de Kiev de la tragedia mortífera.

«La explicación más probable es un ataque por parte de los militares de Ucrania o miembros de las unidades paramilitares nacionalistas», según el comunicado del ministerio de Asuntos Exteriores de la autoproclamada RPD.

Sin embargo, el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, a su vez, acusó a las fuerzas prorrusas de las regiones orientales del país al mismo tiempo que condenó el ataque.

«Estas muertes están en la conciencia de los rebeldes de RDP y LNR (República Popular de Lugansk) y todos los que están detrás de ellos”, dijo el mandatario ucraniano en un comunicado en el que también se comprometió a firmar un decreto el próximo miércoles para reforzar el Ejército del país.

Por su parte, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) condenó en la misma jornada del martes el ataque y urgió una investigación inmediata para identificar a los autores de este atentado violento.

Además, el comisionado para los Derechos Humanos de la Cancillería rusa, Konstantin Dolgov ha condenado este miércoles el ataque mortífero y ha señalado al Ejército ucraniano como culpable de la tragedia.

Moscú «exige una investigación imparcial de este delito, incluso por la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) y el castigo de los responsables», ha manifestado Dolgov.

Según los medios, 11 civiles murieron y otros 17 resultaron heridos en el referido ataque registrado en la ciudad de Donetsk (este de Ucrania) cuando su autobús fue alcanzado por un cohete en un retén del Ejército ucraniano.

Casi 5000 personas, entre civiles y combatientes, han muerto en las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk desde mediados del pasado mes de abril, como consciencia de los enfrentamientos entre las fuerzas ucranianas y los prorrusos en el este de Ucrania.