Presidente tunecino llama a la unidad nacional debido a masivas manifestaciones
La crisis política se agudizó en el país luego de la muerte del importante líder de izquierda y opositor, Mohamed Brahmi, asesinado frente a su casa el pasado jueves, así como la muerte de ocho militares en la frontera con Argelia que ha desatado una serie de protestas a favor y en contra del Gobierno.
El presidente de Túnez, Moncef Marzuki, pidió a los partidos políticos y a sus representantes que eviten crear caos en el país.
“Si queremos hacer frente al peligro tenemos que estar unidos”, manifestó Marzuki, en referencia a la tensa situación que se vive en la nación tras la muerte de soldados tunecinos en la frontera con Argelia.
El mandatario hizo un llamado a través de un discurso televisado invitando a la unidad nacional con el fin de “conseguir la estabilidad y la paz en el país”.
Previo al anuncio, la televisión nacional había informado que ocho militares de Túnez murieron en un intercambio de disparos con un grupo armado en una zona cercana a Argelia, donde el Ejército trata desde hace meses de neutralizar un grupo vinculado con Al-Qaeda.
Este hecho generó manifestaciones en la ciudad oriental de Kasserine ante la oficina local del partido Ennahda durante la noche.
A este incidente se suman los asesinatos en menos de cinco meses a dos líderes opositores al Gobierno tunecino, dos referentes de izquierda en el país, pertenecientes al partido Movimiento del Pueblo, que ha generado indignación y masivas protestas en las calles de Túnez, donde se acusa al partido Ennhada del hecho.
Mohamed Brahmi, de 58 años, fue uno de los principales dirigentes de la izquierda en Túnez, quien se caracterizó por sus firmes críticas al partido islamista Ennahdha, actualmente en el poder.
Su asesinato es el segundo caso de dirigentes opositores asesinados en los últimos cinco meses en Túnez, después de que el secretario general del Partido de los Patriotas Demócratas Unificados (WATAD), Chokri Belaid, miembro del Frente Popular al igual que Brahmi, muriera en febrero frente su domicilio a manos de un grupo salafista.